Este blog está vivo gracias a ti. Sí, a ti, querido lector, que en este preciso momento estás dedicando tu tiempo a leer estas líneas. Hoy te dedico este post a ti, quiero darte las gracias.

Cada semana dedico unas 2 o 3 horas a preparar el artículo: elijo la idea de mi Trello, selecciono los mensajes clave que quiero transmitir, desarrollo el porqué de cada mensaje, repaso el artículo varias veces, añado fotos, aplico el formato, paso el corrector, leo el artículo en cada dispositivo, añado las palabras clave, categorías, escribo el mensaje a publicar en las redes y lo publico.

Hasta el año 2016 hacía esto cada 2 meses y durante 2017 lo he hecho cada semana, lo cual lleva trabajo, porque al hacer esto dejas de hacer otras cosas y porque no todos los días estás igual de inspirado. Lo que sí es cierto, es que existe una doble motivación para estar aquí cada semana. La primera es lo que yo he leído de otros durante la semana, otros que han dedicado parte de su tiempo a compartir, llenándome de ideas que me puedo llevar a mi caja de herramientas personales y profesionales, qué menos que intentar poner mi granito de arena en esta gran comunidad con mis experiencias de las que a lo mejor tú también te puedes llevar algo a tu mochila. La segunda motivación es ver las reacciones de otras personas con mis artículos, ésta genera una sensación interna tan bonita que no puedes describir. Un único ‘click’ me hace feliz, porque al menos una persona se ha llevado algo.

Quiero dar las gracias a cada persona que me ha leído en algún momento por ese tiempo dedicado.

Quiero dar las gracias a cada persona que ha compartido mi tiempo y trabajo en sus redes digitales o no.

Quiero dar las gracias a los que además han invertido un poco más con sus preguntas y comentarios.

Me pongo roja sin saber qué contestar cuando en eventos y conferencias me paráis para decirme que os gustan mis artículos, a mi me encantan vuestras palabras de cariño.

Me emociona que algunas personas con las que he compartido más tiempo en particular hayan tenido el detalle de comprarme un libro, como fuiste tú Juan Pérez. O cuando Leo Díaz me regaló una pegatina de Trello porque sabe que soy una super fan.

La verdad es que el despertar de las gracias se debe a lo que Santiago Antelo y Josefina Alonso han hecho por mi. Hace unas semanas me encontré con los dos en la CAS2017 en Sevilla y estuvimos charlando del blog, compartiendo algunas ideas y contándonos un poco de nuestras vidas. A los pocos días, Santiago me pidió una dirección para mandarme un paquete, no tenía ni idea de lo que pretendían y les di la dirección de la oficina. El viernes llegó el paquete y cuando lo abrí se me saltaron las lágrimas. Me prepararon una caja con mi pócima mágica: cerveza, mejillones y patatas fritas. Es la mejor cesta de navidad que he tenido en mi vida. Os dejo todo el proceso de ‘unboxing‘ porque no tiene desperdicio.

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Cuando abrí la caja me emocioné, lloré un poco – si, me puse muy ñoña – y también sentí algo de miedo a la vez. La parte de la emoción y las lágrimas es por la sorpresa y el detalle de preparar algo con tanto cariño con cosas que me encantan. La parte del miedo es porque no era consciente del impacto que podía tener en otras personas. Al final yo escribo cosas de mi día a día, cosas que me pasan en mi oficina, en mi casa, en mi vida y es imposible saber cómo afectan a los que las leen, cuánto les llenas o aportas. Sentí miedo por si en algún momento, algo que comparta puede plantar una semilla incorrecta, pues es todo lo contrario a lo que pretendo. Sé que este año a Santiago y en especial a Josefina, les han chiflado los artículos sobre cómo me organizo con GTD y me alegra mucho porque es lo que más me ha costado escribir este año. Gracias a ambos, sois una pareja maravillosa y me alegra de corazón saber que estáis ahí.

Este detalle me ha hecho empezar a reflexionar sobre cómo ha ido este año, qué nuevas experiencias he vivido, qué cambios he realizado y el beneficio de ellos. Empecé el año con menos de 1000 seguidores en twitter y ahora paso de los 2000, esforzarme en compartir más frecuentemente ha tenido un retorno de inversión impresionante para mi. Como diría Carlos Baute: «sois mi medicina, mi, mi, mi vitamina».

Un fuerte abrazo a todos y gracias por vuestro tiempo.

11 pensamientos

  1. Agradecer es muy importante. Un acto bidirectional que alimenta no sólo al que recibe el agradecimiento sino al que lo hace. Gracias a ti Vanesa por dedicar tiempo a compartir.

  2. Muchas gracias Vanesa por todo el trabajo que haces. Ya te lo he dicho alguna vez, me encanta la pasión y el entusiasmo que transmites en todo lo que escribes y que a la vez es muy inspirador y motivador.
    Un abrazo y gracias.

  3. … y yo quiero darte las gracias a ti Vanesa por tu constancia y por el soplo de aire fresco que suponen tus publicaciones. La verdad es que me da mucha envidia tu mejora continua en todo lo que haces.
    Eskerrik asko!

  4. He dado sin querer con tu blog buscando artículos sobre trello, ya que llevo utilizándolo un tiempo y quiero sacarle el máximo partido, eres brillante y tu blog ha sido todo un hayazgo, me ha encantado, se nota el esfuerzo y la motivación que dedicas en cada post😘

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