El pasado 1 de Mayo, tuve el enorme placer de participar en #LoQueDureUnaJarra, iniciativa promovida por Guillermo Latorre y Dani Latorre que nació durante la cuarentena COVID-19, donde ambos se tomar una jarra cerveza con otras personas que consideran interesantes y creen tienen mucho que contar y aportar a los demás – artículo de Dani Latorre.
Quiero darles las gracias por la iniciativa, por el buen rollo, por haber contado conmigo para compartir mis aprendizajes laborales, mi experiencia en LATAM Airlines, hablar de quién soy, de cómo ha sido mi cambio de vida y adaptación a Chile. Quiero darles las gracias por crear el entorno para compartir otros aspectos personales que para mí tienen valor, que creo nos hacen más humanos ante aquellos que nos leen, escuchan y siguen en las redes sociales.

Conectar es acordar una hora y no un lugar.
Creo que una de las ventajas que ha tenido esta crisis mundial, es incorporar a nuestro día a día maneras de conectar que a pesar de existir, quizá no eran lo primero que se nos pasaba por la cabeza. Confío plenamente en que esto puede acercarnos más, independientemente de nuestra ubicación física. Cuando me fui lejos de mi lugar de origen, incorporé estas herramientas para seguir cerca de mi familia y amigos, sin embargo, no pude mantenerme en el día a día de eventos, conferencias y comunidades de práctica donde aprendía de otros y compartía mis aprendizajes, debido a que estar presente físicamente era necesario. Ojalá, a partir de ahora la ubicación física no sea una condición para estar presente, aportar y colaborar.
Tras mi reflexión y agradecimientos, os dejo el enlace a #LoQueDureUnaJarra para que disfrutéis de mi cerveza con Guillermo y Dani, así como el resto de capítulos con grandes profesionales.